De aficionados
expertos a productores de buen nivel.
Por Eduardo Yu
Marina Shimura
Los suecos
siempre han sido grandes consumidores de Scotch (sobre todo ahumado), ya sea
por sus largos y fríos inviernos, por su cocina ahumada o por otras similitudes
culturales. En Suecia se haya la
concentración más alta del mundo de clubes de aficionados al whisky. Además en sus tierras se celebra un de los festivales
de cerveza y whisky más grandes del mundo
(Dave Broom, 2012). Es más, los suecos son una de las nacionalidades que más
gusta de visitar atracciones turísticas del whisky escocés y dado a los altos
precios de las bebidas alcohólicas en sus país son muy aficionados a llevarse
unos cuantos “suvenires” en sus viajes.
Esta amplia y
creciente cultura del whisky se ha traducido en un buen número de aventureros estableciendo
destilerías por toda la geografía del país.
De estos
proyectos destaca, Mackmyra la cual
15 años después de ser construida tiene
planes de ampliar sus instalaciones hasta crear una aldea del whisky. En el país escandinavo no se contentan
simplemente con copiar el estilo escocés, sino que se busca crear un estilo
propio, mezclando el uso de innovaciones tecnológicas y materias primas
locales. Un de estas innovaciones tecnologías es el tránsito por gravedad en la
destilería. De este modo el proceso empieza en los pisos superiores de los 37
metros de destilerías para terminar en el piso inferior donde se ubican la sala
de alambiques.
La destilería de
Malbo usa la formula compartida por gran parte de la destilerías del país
del Köttbullar, que consiste en producir
una línea de whiskies frutales (con sabores a naranja, ginseng y jengibre) y
una línea de whiskys ahumados. Para la producción de sabores ahumados no se
utiliza turba sino que se usa madera de enebro y turba local. Las posibilidades
de estos destilados se multiplican teniendo en cuanto la gran variedad de tipos
de barricas utilizadas. A las tradicionales ex Bourbon y Vino de Jerez se la
unen el roble Sueco. Como resultado la destilería ha lanzado alrededor de 15 ediciones a la que se le unen
múltiples proyectos.
Aromas: Cerezas, manzanas, mandarinas, natillas, madera, caramelo
Sabores: Plátano, caramelo de fresa, chicle y nueces.
Final: Ligero, prolongado y especiado.
Veredicto: Equilibrado, suave y muy complejo para ser un
viaje joven.
Aegirs Bior- Este un whisky es fruto de la colaboración entre
Mackmyra y la cervecera noruega de Aegir.
Aromas: Naranjas, chocolate, tierra, cerezas y almendras
Sabores: Caramelo, canela, madera tostada
Final: Ciruelas y pasas que desaparecen para poco a poco para dejar paso un largo
final especias.
Veredicto: Buen whisky elegante un combo perfecto de frutas y
sabores terrosos y de barrica.
Mackmyra Malstrom: Edición limitada de
1500 botellas que se compone de: Barricas de vino jerez, Barricas de roble
europea, barricas de roble sueca y whisky turbado.
Aroma: mandarinas, frutos secos, tostadas y mermelada.
Sabores: fresas, mermeladas, almendras y pimienta
Final: fresas, cerezas y especias. Largo e intenso.
Veredicto: Increíblemente complejo whisky, el clásico whisky
que cada vez que lo pruebas descubres algo diferente.
Me disculpo por
no haber podido conseguir una de las versiones ahumadas, en cuanto pruebe
alguna de ellas, las compartiré con vosotros.
Aunque Mackmyra
es la que más proyección internacional tiene, también destacan otras destilerías:
Hven: Situada en la isla del misma nombre destilo su primer lote en 2008, su
master Blender lleva lo de combinar
diferentes tipos de roble al extremo; usando barricas de roble americano,
europeo, sueco y japonés.
Smogen Whisky AB: Tras destilar en 2010 por primera vez, su
capacidad ha ido en aumento, su meta es crear un estilo ahumado, similar a los
Scotch de Islay.
Otras destilerías:
Box destilleri (2010), Grythyttan Whisky (2010), Norrtelje Brenneri
(2002), Gammelstilla Whisky (2005) Y Gotland Whisky (2011).
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